Conozco el infinito abismo de tus ojos,
que es a veces resorte que devuelve esperanza.
he escuchado el tambor de tu interior
y le he escuchado nombrarme.
Solo quiero tenerte a mi costado
en los minutos antes del sueño
cuando se borra la conciencia
y se desbaratan mis monstruos
Ven, dame el aire aniquilante de tu boca
déjame morir en la cuna de tus palmas
respira de mi boca y muere conmigo.
Zurce mis dedos con los tuyos
y remacha el entramado con un beso
déjame bajarte el cierre vertebral
para desarmarte y verte dentro.
descósete un poco el cuello y yo soltaré el mío
aflojemos la costura
y dejemos libres los instintos
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