Yo, aliento de ti una medida para mi escacez
el frío inmerso en el fruto que coges
y luego tiras al furor del río
cuando sobran espejismos niños
en el movimiento de tus manos

Esta lloviendo
hace tiempo
tu sabes
del lugar preciso
donde
se entrelaza la mas vasta vida con la muerte

En el rincón aquel
el sabor del fuego tejio
otro tejido oscuro donde te guardo
y mi respiración te narra cosas que no sabes
límites que desconoces
caminas conmigo lugares mojados por el cansancio del olvido
y en el trasfondo de unas hojas
esta aun creciendo la ventana donde se rompieron tus muñecos

Poruqe eres fuera de mis ojos y el alcance de mis manos
porque jamás te reconozco en la figura
la simpleza de un abismo
puebla el ruido de nuestras antiguas huellas