miércoles, noviembre 30, 2005

El abrazo

Vino a abrasarse de mi en la oscuridad,
Entre sueño contesté con un gemido,
Me abrazó como los días que hace frío, pero es verano
Y el calor de su cuerpo terminó de sofocarme.
No dije nada, solo me imaginé sus inmensos ojos
Enmarcados en la luz naranja que viene de la calle
Y callé, por que para abrazar no hay mejor cosa que el silencio

Pero el calor fue mayor,
Más con su aliento que incendia mi cuello
Y el peso de su pierna en la mía
Como una tonelada de culpa de la que no me puedo redimir

Llovió y logre dormir
Al despertar la huella de su cuerpo en la sábana desmayada,
Ahí ante mis ojos
Como única marca de su paso
De su sofocante abrazo

miércoles, noviembre 23, 2005

No puedo

No puedo ser la mujer de tu vida porque soy la mujer de la mía

martes, noviembre 22, 2005

Recuento

Que puedo decir si la experiencia de cada uno es así, única, absolutamente personal. Mi intenso y desafiante deseo de incrustarme en una vida en la que pensé tenia cierto espacio, no existía siquiera, creo que esa comprobación fue la parte mas dolorosa, no sé si seremos las mujeres resentidas por naturaleza, pero me dolió profundamente el roce con la verdad, aun me duele, pues si bien gran parte de esa mentira me la cree yo, también hubo gente que me ayudo a construirla, desentendidos ahora de ese dolor.

No puedo ni debo reclamos a nadie, fui e iré, si acaso así sea, bajo mi propio y único riesgo, desafié mi propia percepción y confié en mis sueños e instintos más que en las razones y en la verdad, pero no me arrepiento. Ese lugar creado, mentido y fantaseado fue un refugio necesario para mi subsistencia, tal vez ahora será otro, es necesario que así lo sea, le agradezco su vida, y por que no, también su dolor.

De todo esto solo sé decir que estoy segura que fue como debía de ser, como son los viajes, una construcción de puerta y posterior apertura de la misma en la cabeza, lo mejor fue encontrarme, saberme dueña de mi, perdida en mis dudas, tristezas y fantasías, pero por fin yo y solo yo, mas yo que nunca.

Tal vez el Hernán presentía esa perdida, ese dolor, esa posibilidad de imposible que traía yo conmigo, por eso este viaje le dolió mucho, mas que cualquier otro.

Solo 4 días después de llegar extrañe su presencia, supe de su amor y del mió por el, es verdad que los príncipes azules no existen, excepto por Joel Santillán quien me salvo en México DF como se salvaba a las princesas del siglo XIV, pero el Hernán es el hombre para mi, lo sé con la certeza de sus manos grandes y sus ojos chicos, y por sus palabras mudas que por fin escuche y leí.

Ahora veo todo lo mío más grande y feliz, es verdad que le tengo un miedo feroz a la soledad y fue lo único realmente claro que encontré en el viaje, mi más vieja y temida amiga soledad. Yo contra el mundo, yo contra mi misma.

Yo quiero agradecer, como se agradece en las tapas de los discos, a todos los que me ayudaron en este saludable suicidio, a mis entrañables amigos y amigas, que soñaron todo conmigo y vivieron mis más alocadas ilusiones, mis amigo-hermanas de Sucre que me hicieron sentir la felicidad de su complicidad. A mi amigo Magnus, grande como su nombre, y puesto en mi vida por el cielo y las coincidencias para impulsarme y entusiasmarme como solo sus ancestros vikingos se entusiasmarían con aventuras marítimas. A mi hermana Tika por la levedad que le ayuda a transitar la vida, la misma que me da para tomarlo todo con más calma. A mi madre y padre por entender que no puedo cumplir todos sus sueños. A Jesús Torres por darme lo que tiene, sin más. Al único y verdadero príncipe azul que pisa este planeta Joel Santillán.

Al único dueño de mi risa, mis pies y mis manos, Hernán por dejarme amarle y guardar mi cariño en el hueco de su espalda baja. Por sus palabras y su corazón.

Así termina esto, o tal ve solo empieza.

otros ojos

Todo se ve tan grande ahora

sábado, noviembre 19, 2005

Joel comprom un colchon inflable y dos almohadas para que pueda dormir mas comoda en su pequeñisima pieza de una colonia perdida del DF, sus amigos la llaman Chacagua.

Manejanod por la inmensa ciudad mientras le espero en el auto, veo el nombre de las calle: Amores Colonia del Valle, no 1066. exacto lugar de i concepcion 25 años antes, cuanod mis padres eran dos jovenes universitarios.

Que es esto desitno? coincidencia? hay algo que alguien me quiere decir? como es que de las dos veces que vengo a esta ciudad, siempre llego sin pensanr a esta colonia esta calle? que es esto? una señal? o suna cimple superfluo forma en que el destino se birla de mi.

no se nose nose
extraño tanto tu abrazo. el lugar secreto de tu cuello.

viernes, noviembre 18, 2005

como montañas

"desde lejos ya te encuentro
ya te tengo ne mi mirada
ya contemplo en tu infinito mis montañas recordadas

yo no logro explicarme con que cadenas me atas
con que hiervas me cautivas
dulce tierra boliviana"


..... los lugares mas comunes, las cosas mas cotidianas de otros, son un despertar fresco y nuevo para mi, la ventana a una nueva dimension, feliz y triste, de muerte y vida, una contradiccion llena de todo, como las montañas, llena de glorias y de caidas, tan simplemente unico ante los ojos de cada simple inumerable y ordinario ser.

miércoles, noviembre 16, 2005

Yo tambien te extraño

te extraño,
extraño tu sonrisa
extraño tu eterno BUENISIMO
extraño tu pelo
extraño tu aroma
extraño tus manitos
extraño tus piesitos
extraño tu barriguita
extraño tu humor
extraño tus preopupaciones
extraño tus cantos en la calle
extraño tu abrazo
extraño que me hagas enojar
extraño a la persona que soy cuando estoy contigo
te extraño a ti
te extraño mucho todos los dias y las noches
te extraño todo el tiempo, hasta cuando estoy dormido.

lunes, noviembre 14, 2005

La picadura del bicho

el asfalto tibio de la madrugada
el flan y el jugo de uva
la pelirroja de falda de colores
la trompeta llorona que estremece el alma
el polimarcha de lasser dakar
el sueño
los sueños
las muertes
la vida despues de ma muerte
las voces de suecia
el corazon galopante
los ojos humedos
el calor, el calor, el calor
la picadura del bicho