En la familia Ferrufino campos se celebraban todos los cumpleaños a lo grande, Doña María terminaba jadeante diciendo salúd!!!!! con la cara colorada y las manos sudorosas de tanto bailar, trabajaba desde la mañana sin cerrar su tienda que era su mayor ocupación, se turnaba con sus hijos para no dejar la tienda y al mismo tiempo cocinar todos los platos festivos, acordados en familia, discutidos y analizazdos según múltiples factores, tiempo, animales que había en el corral, número de invitados, etc. Lo menos elaborado que hacía para los cunpleaños le tomaba la mañana entera de trabajo, eso si cocinaba algo en parte comprado. La hija menor pedía permiso al trabajo y todos los allegados a la casa nos contagiábamos del ritmo de celebración en los días previos y posteriores a los cumpleaños.
Doña María trabajaba incasabelmnte en su tienda, despertaba al amanecer y se acostaba cerca a media noche, habiá trabjado duramente toda su vida, así que las fiestas eran ocasiones imperdibles, que no le quitaban el ritmo sino que eran parte de él. asistía con su esposo a los prestes de santos, virgencitas, cumpleaños, matrimonios, bautizos, velorios, graduaciones, entierros, solo interrumpía su labor en la tienda para esas ocasiones, pero aún así madrugaba al día siguiente, aunque a las 2 de la tarde, cuando los clientes estan en el trabajo y la tienda tiene cierta calma, se le cerraban los ojos con el ronroneo de los refrigeradores y la radio a bajo volumen.
Dóña María fiel a sus costumbres, ch´allaba su tienda cada 1er. viernes de mes, en un brasero grande ponía la k´oa de la cancha y antes de cerrar la tienda se tomaba en la puerta de su tienda una cerveza con los que por ahi la acompañaban, echaba un poco al piso para que la Pachamama la proteja a ella y a toda su familia, o en orden inverso como siempre fue su vida, y luego hacia pasar la k´oa humenate de incienso por toda la tienda, la dejaba en al puerta mientras cerraba todo y se terminaba la cerveza.
Pero Doña María tenía entre sus palabras y su vida de fiestas y trabajo secertos ocultos en una capa mas profunda de su piel.